EXPERIENCIAS DE AZAR
Hay situaciones en la vida diaria en las que no podemos saber qué resultado va a salir, pero sí sabemos los posibles resultados; son situaciones que dependen del azar. Al lanzar una moneda al aire no sabemos si saldrá cara o cruz, pero sí conocemos los posibles resultados. Cuando lanzamos un dado no sabemos el número que saldrá, pero sabemos que hay seis posibles resultados.
El resultado en el lanzamiento de una moneda o en el lanzamiento de un dado depende del azar. El lanzamiento de una moneda o de un dado es un fenómeno aleatorio.
Que el próximo niño que nazca sea niño o niña es un fenómeno aleatorio, pero la hora de la salida del sol o las estaciones por las que pasará el metro en una línea del metro no son fenómenos aleatorios porque conocemos de antemano lo que va a suceder. Llamamos fenómenos aleatorios a aquellos cuyos resultados dependen del azar. Cada uno de los resultados de un fenómeno aleatorio se llama suceso.